Lecturas del día

Lecturas para la memoria de San Benito de Nursia

Lecturas-diarias-11-julio

Pr 2,1-9 / Sal 33,2-3.4 y 6.9 y 12.14-15 (R.: 2a) / Mt 19,27-29

PRIMERA LECTURA

Presta atención a la prudencia.

Lectura del libro de los Proverbios     2,1-9

Hijo mío, si aceptas mis palabras
y conservas mis consejos,
prestando oído a la sensatez
y prestando atención a la prudencia;
si invocas a la inteligencia
y llamas a la prudencia;
si la procuras como el dinero
y la buscas como un tesoro,
entonces comprenderás el temor del Señor
y alcanzarás el conocimiento de Dios.
Porque es el Señor quien da sensatez,
de su boca proceden saber e inteligencia.
Él atesora acierto para los hombres rectos,
es escudo para el de conducta intachable,
custodia la senda del deber,
la rectitud y los buenos senderos.
Entonces comprenderás la justicia y el derecho,
la rectitud y toda obra buena.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial

Sal 33,2-3.4 y 6.9 y 12.14-15 (R.: 2a)

R/. Bendigo al Señor en todo momento.

Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R/.

Proclamad conmigo la grandeza del Señor,
ensalcemos juntos su nombre.
Contempladlo, y quedaréis radiantes,
vuestro rostro no se avergonzará. R/.

Gustad y ved qué bueno es el Señor,
dichoso el que se acoge a él.
Venid, hijos, escuchadme:
os instruiré en el temor del Señor. R/.

Guarda tu lengua del mal,
tus labios de la falsedad;
apártate del mal, obra el bien,
busca la paz y corre tras ella. R/.

EVANGELIO

Vosotros, los que me habéis seguido, recibiréis cien veces más.

+ Lectura del santo evangelio según san Mateo     19,27-29

En aquel tiempo, dijo Pedro a Jesús: «Nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué nos va a tocar?»
Jesús les dijo: «Os aseguro: cuando llegue la renovación, y el Hijo del hombre se siente en el trono de su gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para regir a las doce tribus de Israel. El que por mí deja casa, hermanos o hermanas, padre o madre, mujer, hijos o tierras, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna.»

Palabra de Dios.