Ciclo A – Adviento – Semana 03 – Sábado
17 de diciembre de 2016
+ En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Oración inicial
Señor, reconozco tu amor por mí. Sé que me cuidas y acompañas siempre, y por eso quiero pedirte al comenzar esta oración, que me ayudes a abrir mi mente y corazón a la escucha de tu palabra, para que así pueda día a día seguir creciendo en la fe y en el amor a Ti y a mis hermanos.
Acto penitencial
(Hago en silencio un breve examen de conciencia de mi último día).
Señor, con inmensa confianza me pongo ante Ti, reconociéndome necesitado de tu perdón, de tu misericordia. Renuévame Señor las fuerzas en mi combate contra mi pecado, y lléname de amor y de esperanza en mi camino hacia la santidad, muy en especial en este tiempo en que me preparo para acogerte en mi corazón en la Navidad.
Lectura Bíblica según el Evangelio del día
«Jacob fue padre de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es llamado Cristo» (Mt 1,1-17)
Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham: Abraham fue padre de Isaac; Isaac, padre de Jacob; Jacob, padre de Judá y de sus hermanos. Judá fue padre de Fares y de Zará, y la madre de estos fue Tamar. Fares fue padre de Esrón; Esrón, padre de Arám; Arám, padre de Aminadab; Aminadab, padre de Naasón; Naasón, padre de Salmón. Salmón fue padre de Booz, y la madre de este fue Rahab. Booz fue padre de Obed, y la madre de este fue Rut. Obed fue padre de Jesé; Jesé, padre del rey David. David fue padre de Salomón, y la madre de este fue la que había sido mujer de Urías. Salomón fue padre de Roboám; Roboám, padre de Abías; Abías, padre de Asá; Asá, padre de Josafat; Josafat, padre de Jorám; Jorám, padre de Ozías. Ozías fue padre de Joatám; Joatám, padre de Acaz; Acaz, padre de Ezequías; Ezequías, padre de Manasés. Manasés fue padre de Amón; Amón, padre de Josías; Josías, padre de Jeconías y de sus hermanos, durante el destierro en Babilonia. Después del destierro en Babilonia: Jeconías fue padre de Salatiel; Salatiel, padre de Zorobabel; Zorobabel, padre de Abiud; Abiud, padre de Eliacím; Eliacím, padre de Azor. Azor fue padre de Sadoc; Sadoc, padre de Aquím; Aquím, padre de Eliud; Eliud, padre de Eleazar; Eleazar, padre de Matán; Matán, padre de Jacob. Jacob fue padre de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es llamado Cristo. El total de las generaciones es, por lo tanto: desde Abraham hasta David, catorce generaciones; desde David hasta el destierro en Babilonia, catorce generaciones; desde el destierro en Babilonia hasta Cristo, catorce generaciones.
Lectura espiritual breve
Lee con atención la siguiente reflexión del Padre Juan José Paniagua:
Al leer la genealogía de Jesús uno podría pensar: ¡Qué grandes personajes deben haber sido los antepasados de Jesús! Pero en realidad no fue tanto así. Quizá lo que más nos sorprende es la gran lista de pecadores: Judá vendió a su hermano José. David mandó a matar a su general. Reyes idólatras, mujeres de mal vivir, etc.
Pero esas fueron las personas que Dios eligió para que prepararan el camino de su Hijo. Con buenos y con pecadores, así es como Jesús construyó la obra de nuestra salvación. Con hombres de carne y hueso.
Y si los antecesores de Jesús fueron así, ¿no lo seremos también sus sucesores? Porque en realidad así ha querido hacer Dios las cosas. Habiendo podido hacer todo Él solo, ha querido valerse de nosotros, con nuestras grandezas y miserias, para construir la historia de la salvación. Y hoy quiere valerse también de ti, para que con tu cooperación Él pueda hacer maravillas a través de tu pequeñez.
Así es la Iglesia. No es un museo de santos, sino un hospital de pecadores. Dios nos invita a ser humildes para cooperar en su obra de salvación.
Breve meditación personal
Haz silencio en tu interior y pregúntate:
1.- ¿Eres de los que acepta con humildad sus limitaciones, errores y falencias? ¿O de los que con frecuencia buscan excusas y justificaciones?
2.- ¿De qué manera descubres que Dios te pide en este tiempo que cooperes con su obra?
Acción de gracias y peticiones personales
Muchas gracias Jesús por este momento de encuentro contigo. Te pido que pueda mantenerme en actitud de escucha y de acogida de tu palabra en lo queda de este día, y pueda así dar testimonio de tu amor en medio del mundo. Amén.
(Si quieres, puedes pedirle al Señor por tus intenciones).
Reza un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria…
Consagración a María
Termina rezándole a María:
Salve, Reina de los Cielos
y Señora de los ángeles;
salve raíz, salve puerta,
que dio paso a nuestra luz.
Alégrate, Virgen gloriosa,
entre todas la más bella;
salve, agraciada doncella,
ruega a Cristo por nosotros.
D: Que con el auxilio de tan dulce intercesora,
T: seamos siempre fieles en el terreno caminar. Amén
+ En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.